Algunas conversaciones me resultan agotadoras.
Por eso, cuanto menos conozco esta ciudad
más agotadora me resulta su conversación.
Esa que habla sobre ruido, humo, ansiedad, luces de neón
y olor a mar.
Cuanto menos conozco esta ciudad
más agotadora me resulta la espera
de esas nuevas conversaciones que hablan de otras ciudades:
Tu ciudad.
La misma ciudad en la que dejé varado el corazón
y al que fui, personalmente, a rescatar
con total fe de haberla perdido en el camino.
Por eso, cuanto menos conozco esta ciudad
más echo de menos la tuya.
...
Rayco Ángel Santana Pulido (RASP).