Hoy amaneció con lluvia
todo este campo de batalla
que es mi barrio en tu ausencia.
Escucho discos y lo que parecen poemas,
más bien diría que verdades sobre mí,
y alguna mentira, para qué mentir.
Mi ventana da hacia el parque de la infancia
donde marqué goles, reí y hasta rompí alguna nariz.
Pero ya no frecuento este lugar,
aunque me quede a un palmo saltando del octavo,
cayendo con la seguridad de la muerte precisa,
con el peligro de resbalar por la lluvia al caer.
Curiosa la metafísica:
Mi muerte no está en saltar, sino en no saber pisar.
Y las huellas se pierden por las alcantarillas.
...
Rayco Ángel Santana Pulido (RASP).